Nairo Quintana está ante uno de los momentos más difíciles de su carrera deportiva luego que la UCI haya decidido una sanción para él por uso de tramadol. Una situación bastante confusa, puesto que no es una sustancia dopante, pero sí prohibida por la entidad deportiva por supuestos problemas a la salud.

El hombre clave en este caso legal de Nairo es Andrés Charria, un destacado abogado deportivo bogotano que recuperó la medalla olímpica de María Luisa Calle (acusada erróneamente de dopaje) y que se ha asociado con científicos italianos para demostrar que Nairo no usó tramadol.

El propio Andrés Charria escribió un artículo este lunes para el portal ‘Asuntos Legales’ y explicó que se trata de «Un tema de ciclismo parecido a dopaje sin ser dopaje, gracias a una decisión caprichosa de UCI», a pesar que Quintana ha negado el uso de la sustancia.

«Como cualquier tribunal arbitral, vía clausula compromisoria, se puede solicitar que árbitros especializados en temas deportivos solucionen un conflicto emanado de la interpretación o ejecución de un contrato. Sin embargo, es más habitual llegar al TAS en apelación de alguna decisión tomada por las federaciones internacionales deportivas».

Y el abogado agrega que «las sanciones por dopaje que en primera instancia se dictan en Federaciones Internacionales pueden ser apeladas ante este tribunal».

Puntos clave de afrontar un caso en el TAS

«A diferencia de la forma como funciona nuestra justicia, el TAS es bastante informal; los poderes, los escritos y cualquier comunicación requiere de poca formula sacramental y en general resulta difícil que alguna comunicación, petición o aún poder sea rechazado por falta de alguna formalidad o palabra; la idea es solucionar los problemas bien y si es rápido, mejor. Hay buena fe en todas las actuaciones».

Además, Charria explica que hace unos años el TAS incluyó el español como una de sus lenguas oficiales y eso facilita la argumentación del caso Quintana desde los documentos oficiales y ante una eventual audiencia que no ve tan probable en este caso.

Se necesitan «dos escritos, uno muy sencillo llamado declaración de apelación donde constan unos pocos datos como decisión que se apela, designación del árbitro, las pretensiones y si se hace necesaria alguna medida previa, con esto se cancelan mil francos suizos que no son reembolsables. Diez días después se presenta la memoria de apelación con todos los anexos y pruebas necesarias».

«Se corre traslado a la contra parte que a su vez nombra un árbitro, el director administrativo calcula los costos del proceso que cada parte debe pagar y entre los dos árbitros nombrados por las partes se nombra al presidente del panel. Con todo esto se dicta una orden de procedimiento que deben firmar las partes y si es necesario se fija fecha para audiencia. En un período relativamente corto de tiempo, el panel deberá emitir laudo que salvo un error específico de procedimiento no tiene recurso alguno».

¿Qué sigue en el caso Quintana?

«En teoría se trata de un proceso bastante sencillo, la realidad dista mucho de esta impresión inicial. Los temas procesales, es cierto, no son muchos y son pocos los problemas aparecen por esta causa; sin embargo, presentar una apelación estructurada y con alguna posibilidad de cambiar la decisión inicial es realmente complicado», explica Charria.

De esa manera, Nairo debe esperar el contrataque de la UCI ante el TAS (tiene plazo de 10 días desde el pasado viernes) donde ellos deben rechazar los argumentos del abogado Charria y dejar la decisión al tribunal deportivo que podría tardar entre 3 semanas y 5 meses.

Algunos casos se manejan con más urgencia que otros dependiendo la coyuntura social y deportiva, por lo que el de Nairo podría resolverse antes de finalizar el año teniendo en cuenta que en medio estaría la permanencia de Arkea en el World Tour si finalmente pierden los puntos obtenidos por Quintana en el Tour de Francia donde fue descalificado por la UCI debido al supuesto uso de tramadol.

Cabe señalar que Nairo no tenía prohibición para competir en la Vuelta a España ni en ninguna otra carrera UCI, pero él decidió bajarse de la ronda ibérica para enfocarse en su defensa ante el TAS y por ahora entrena en Europa con un calendario incógnito para lo que resta de temporada.

Tomado de: www.marca.es