En un final emocionante a pura velocidad, Jasper Philipsen ganó la Milán-San Remo 2024. El ciclista belga se impuso al sprint en la Vía Roma y se alzó así con el primer monumento de la temporada, que cónto con un recorrido de 288 kilómetros.
Los puestos de honor lo completaron el australiano Michael Matthews (Team Jayco AlUla) y el esloveno Tadej Pogačar (UAE Team Emirates), quienes terminaron 2° y 3°, respectivamente.
Como de costumbre, se presentó una fuga temprana con muchos italianos. Sergio Samitier (Movistar), Romain Combaud (dsm-firmenich PostNL), Davide Baldaccini (Corratec-Vini Fantini), Valerio Conti (Corratec-Vini Fantini), Kyrylo Tsarenko (Corratec-Vini Fantini), Davide Bais (Polti Kometa), Mirco Maestri (Polti Kometa), Andrea Pietrobon (Polti Kometa), Alessandro Tonelli (VF Group-Bardiani CSF-Faizanè) y Samuele Zoccorato (VF Group-Bardiani CSF-Faizanè).
La escapada no obtuvo mucha ventaja. El Alpecin-Deceuninck y el Lidl-Trek, se encargaron de la persecución y mantuvieron la ventaja controlada en tres minutos. En el Passo del Turchino, la primera subida del día, no pasaron muchas cosas.
En el Tre Capi, el Capo Mele, el Capo Cervo y el Capo Berta, vimos por primera vez a los hombres del UAE Team Emirates a la cabeza del pelotón, lo que selecionó el grupo de favoritos. Sorprendentemente, el campeón de Europa Christophe Laporte (Visma | Lease a Bike) fue uno de los damnificados
Antes de la Cipressa, se presentó una fuerte aceleración con el mexicano Isaac del Toro, luego, Tim Wellens tomó el relevo y como resultado, el pelotón quedó reducido a unos 30 hombres, quienes coronaron la cima.
Después de una desafortunada caída de dos de los escapados en el descenso, solo Davide Bais (Polti Kometa) permaneció en la cabeza de la carrera. De este modo, el italiano aguantó un poco más al frente de la carrera, mientras que el grupo perseguidor se fusionó.
En el Poggio, los hombres de Tudor trabajaron en función de Matteo Trentin,luego el Ineos Grenadiers tomó el relevo, pero era cuestión de esperar una aceleración real. Wellens lo hizo a unos dos kilómetros de la cima y lideró así de forma impresionante un ataque de Pogacar. El esloveno arrancó a 900 metros de la cima con Van der Poel a su rueda. Lo mismo ocurrió con Alberto Bettiol y Filippo Ganna.
Sin embargo, Pogacar y compañía desistieron de su intento, por lo que varios corredores se unieron nuevamente. Minutos después el esloveno aprovechó el momento de desesperación y volvió a atacar, pero no tuvo éxito.
El último kilómetro, justo antes de bajar, vimos el típico ataque de Matej Mohoric, quien se alejó del grupo e inmediatamente tomó una gran ventaja. Sin embargo, el exganador de la clasica italiana no pudo aguantar y volvió a ser atrapado a falta de un kilómetro para el final. En el embalaje el belga Jasper Philipsen fue el más rápido.
Fuente: Revista Mundo Ciclístico