«Estoy bien, mañana sigo en la carrera», manifestó Nairo Quintana dando un parte de tranquilidad luego de sufrir dos caídas en el Tour de Turquía. El ciclista terminó la tercera etapa con heridas visibles y perdiendo tiempo en la general, pero no se baja de la bicicleta y continúa con miras al objetivo de la temporada, el Tour de Francia.
El Arkea recibió la invitación oficial por parte de la ‘Ronda Gala’ para la edición 2022, la cual será la novena participación del Boyacense. «El sueño amarillo» es el gran anhelo del ciclista y, aunque confesó que siente la llegada de los años, sus esfuerzos están enfocados en estar en el podio en París.
«Comienzo a ver mis primeras canas y eso es preocupante porque cuando vi la primera tuve muchísimo bajón. Hablando con mi familia me dijeron que no me preocupara porque eso no es vejez, sino experiencia. Poco a poco seguiremos adelante con la misma ilusión que tenía cuando tenía 20 años. Mis deseos son luchar por la clasificación general y estar lo más cerca posible del podio», dijo el pasado 9 de febrero en una rueda de prensa virtual.
Sus palabras son muestra de la competitividad y fortaleza, facultades que ha dejado claras a lo largo de su carrera en la que ya tiene el Giro de Italia y La Vuelta en sus estantes. La meta por cumplir es la camiseta amarilla y con ese propósito inicio la temporada.
Francia ya fue testigo de la buena forma en la que Nairo se encuentra para la carrera de tres semanas más importante del ciclismo. El colombiano se coronó campeón del Tour de la Provence 2022, escoltado en el podio por Julian Alaphilippe y el danés Mattias Skjelmose
Son los 32 años de experiencia y millones de kilómetros en sus piernas que fortalecen su mentalidad. Es bien llamado Nairoman, porque es un ciclista de acero y en el próximo Tour de Francia espera demostrarlo una vez más, con el espectáculo que acostumbra, pero también entando en el podio, ojalá en lo más alto.
Tomado de MARCA.es