El venezolano Daniel Dhers conquistó la medalla de plata en el ciclismo BMX Freestyle, una prueba que debutó en los Juegos Olímpicos de Tokio-2020 y en la que el australiano Logan Martin se convirtió en el primer campeón olímpico.
El bronce fue para el británico Declan Brooks, mientras que otro representante de América, el costarricense Kenneth Tencio, que aspiraba a ser el primer deportista masculino en dar una medalla olímpica a su país, acabó cuarto a tres décimas del podio.
«Es muy emocionante tener una medalla en unos Juegos, pero ha sido extremadamente difícil, porque fue poner todo lo que había aprendido en mi carrera en 60 segundos», declaró el venezolano.
La primera final olímpica del BMX Freestyle tuvo un desenlace apoteósico y Logan acabó con la mejor puntuación 93,30, por los 92,05 de Dhers y los 90,80 del británico Bruce. Tencio obtuvo una mejor puntuación de 90,50, que no le sirvió para subirse al podio.
Con espectacular ejercicio en el primer ‘run’, ya había avisado la víspera que se reservaba trucos para la final, el venezolano logró una puntuación de 90,10, solo superado por el gran favorito al oro, el australiano Logan Martin (93,30), mientras que el costarricense Tencio acabó 4º (84,20), al pie del podio.
En un emocionante segundo ‘run’, el británico Declan Brooks, tercero tras el primer paso, superó la puntuación de Dhers (con 90,80 de puntuación) y el siguiente participante, Tencio, se colocaba en el podio provisional con 90,50.
Dhers, el más veterano de todos los participantes y el único en haber nacido en los años 1980 (36 años), ejecutó un segundo ejercicio que le valió 92,05 puntos, asegurándose el podio y, por consiguiente, dejando sin medalla al costarricense Tencio.
El único que podía quitarle la plata al venezolano era el japonés Rim Nakamura, pero se quedó en 85,10 puntos en el segundo ejercicio y desató la euforia entre los seguidores venezolanos presentes en las gradas.
«Una cosa que tengo yo es experiencia. Llevo como profesional desde 2003 y ya he vivido todo tipo de situaciones. Me dije que estaba en unos Juegos Olímpicos y que no tenía que escatimar ningún truco, voy a ir a darle con todo. Es loco porque a veces dudas, pero no tenía nada que perder y todo por ganar. Quería demostrarme que podía», explicó Dhers tras colgarse la plata.
Sorpresa en la final femenina –
Antes se había disputado la final femenina, en la que saltó la sorpresa, ya que la gran favorita, la estadounidense Hannah Roberts, triple campeona del mundo, se vio superada por la británica Charlotte Worthington, con un segundo recorrido que incluyó un truco inédito en una competición femenina: un ‘Backflip 360º’, es decir, una voltereta hacia atrás con giro de la bicicleta en el aire.
Por ese ejercicio, la británica obtuvo 97,50 puntos, superando los 96,10 de Roberts, que tras la ceremonia de entrega de medallas apareció en la zona mixta con una férula que le inmobilizaba el tobillo derecho y lamentó que no había podido «dar el 100%» después de sufrir una caída en una práctica.
La suiza Ducarroz completó el podio con un ejercicio de 89,20 puntos, mientras que la chilena Macarena Pérez Grasset, única participante latinoamericana en la prueba femenina, acabó octava (de 9 participantes), por lo que obtuvo un meritorio diploma olímpico.
A la chilena siempre le quedará el honor de haber sido, el sábado, la primera ‘rider’ en competir en unos Juegos Olímpicos, ya que esta espectacular disciplina debutaba en el programa olímpico en Tokio-2020.